Del mismo modo que la xerostomía, la hipersalivación también supone un claro problema de salud oral. Esta puede dar lugar a múltiples afecciones, favoreciendo el desarrollo y aparición de infecciones orales. A su vez, también puede resultar potencialmente incómoda para el afectado, dado el babeo constante que produce.
La hipersalivación, también conocida como sialorrea, es un trastorno bucal que se caracteriza por una producción excesiva de saliva en la cavidad bucal. Mientras que antes de los dos años de edad se trata de algo completamente normal, a partir de los 4 ya se considera como patología, por lo que puede estar indicando otro tipo de problemas de mayor gravedad.
Las causas
La sialorrea puede afectar durante la infancia y también durante la adultez.
Tal y como hemos comentado, en niños menores de dos años la incontinencia salival resulta muy frecuente, especialmente durante el proceso de dentición. De hecho, es un signo claro que puede indicar que el proceso de erupción de los primeros dientes temporales se acerca. Ahora bien, pasada esta edad el babeo debería cesar. De no ser así, resultará conveniente tratar de averiguar las causas. Estas pueden ir desde el padecimiento de algún tipo de alergia hasta una infección en las vías respiratorias.
Por otro lado, uno de los motivos más habituales de sialorrea consiste en el padecimiento de algún tipo de enfermedad neurológica. A menudo, este tipo de enfermedades dan paso a disfunciones de los reflejos de deglución, lo que no permite tragar adecuadamente la saliva y provoca, de este modo, una acumulación excesiva. Algunos de estos trastornos pueden ser la Esclerosis Lateral Amiotrófica -ELA-, el Parkinson, una parálisis cerebral, las propias secuelas de un infarto cerebral o un posible traumatismo cerebral grave.
Existen otras causas que pueden venir derivadas de aspectos bucodentales, como el uso de prótesis dentales removibles o los tratamientos de ortodoncia. Además, el consumo de ciertos fármacos también puede provocar sialorrea.
Finalmente, durante el embarazo es posible que, dados los numerosos cambios hormonales por los que pasa el cuerpo de la mujer, pueda darse una acumulación excesiva de saliva en la boca.
Síntomas
El principal síntoma de la sialorrea es la acumulación de saliva en la cavidad oral que caracteriza dicha patología. No obstante, existen otros signos que pueden indicar el padecimiento de esta afección. Entre estos, destacamos:
- Grietas o cortes en los labios o la piel de la barbilla.
- Cambios en el sentido del gusto.
- Aparición de halitosis o mal aliento.
- Dermatitis.
- Tos y náuseas.
Cabe destacar que existen dos tipologías diferenciadas de sialorrea, la anterior y la posterior.
La anterior es la más común, ya que viene dada por la incontinencia de saliva que termina produciendo su derrame. Suele estar relacionada con la aparición de alguna enfermedad neuromuscular.
Por el contrario, la sialorrea posterior consiste en una acumulación de saliva que, en vez de derramarse, se va hacia la faringe, pudiendo llegar a provocar problemas de respiración.
Tratamiento
En función de cada caso y de las razones que motiven la aparición de sialorrea, el tratamiento deberá ajustarse y adecuarse a cada paciente.
- Fármacos: En aquellos casos en los que la hipersalivación venga dada por el consumo de ciertos fármacos, la primera indicación será cesar su administración o bien sustituirlo por otro. Para ello, será imprescindible acudir a un profesional que supervise este cambio.
- Fisioterapia: Cuando la sialorrea se da por problemas en el control de los músculos faciales, pueden recomendarse diversas rutinas y ejercicios de fisioterapia facial o logopedia. De este modo, se persigue que el paciente consiga recuperar el control de la musculatura facial y pueda así controlar la salivación.
- Inyección de toxina botulínica: Cuando la hipersalivación viene provocada por un exceso de producción de glándulas salivares, la inyección de toxina botulínica consigue taponarlas parcialmente, reduciendo así la salivación. Su duración es de unos seis meses, por lo que se trata de un tratamiento que requiere de mantenimiento constante.
- Cirugía: En casos de hipersalivación severa, puede resultar necesario someterse a una cirugía que se encargue de extraer algunas glándulas salivares, de modo que se reduzca la producción de saliva.
- Tratamiento dental: Teniendo en cuenta las consecuencias que puede desencadenar la sialorrea en nuestra salud oral, deberá acudirse a un odontólogo que pueda valorar el caso y establecer un tratamiento de desinfección periódico. De no llevarse a cabo, se incrementaría el riesgo de sufrir infecciones recurrentemente.
Prevención
Para tratar de reducir o mejorar los efectos de esta patología, existen ciertas recomendaciones bucodentales que pueden serte de ayuda:
- Cepillado dental: Seguir una buena rutina de cepillado dental es imprescindible para prevenir las enfermedades periodontales que podría causar la sialorrea.
- Beber agua: Al tomar agua constantemente a pequeños sorbos, ayudaremos a controlar el exceso de saliva.
- Alimentación saludable: Será conveniente mantener una dieta sana, comer en porciones pequeñas y evitar alimentos con alto contenido de almidón.
- Evitar el tabaco: El tabaquismo puede hacer variar los niveles óptimos de segregación salivar, por lo que su consumo debería evitarse.