De misma forma que en muchos otros ámbitos profesionales, el papel de la mujer ha ido evolucionando con grandes dificultades hasta conseguir un reconocimiento fiel a la realidad en el sector odontológico. La presencia de mujeres en odontología se remonta mucho tiempo atrás y, a continuación, haremos un repaso de las pioneras en el ámbito.
Hildegarda de Bingen, s. XI
La primera mujer con renombre en el sector odontológico nos traslada a la Alemania del siglo XI. Hildegarda De Bingen fue una abadesa benedictina que escribió numerosos libros, tanto religioso como médicos. Uno de estos, Causae et Curae, hacía referencia directa al mundo de la odontología y la importancia de la higiene oral. En este, se ofrecían remedios al cuidado de la salud bucodental, todo ello, obviamente, bajo el prisma de su época.
Las mujeres “barberas”, s. XV
En la Francia de 1420, se autorizó por primera vez que las mujeres pudieran ejercer de barberas. Esta profesión, en su momento, incluía distintos aspectos vinculados al sector dental, tal como la extracción de piezas dentales u otros procedimientos. Años después, en el 1483, Carlos VIII prohibió a las mujeres ejercer tal práctica, dejando en el olvido los muchos nombres de mujeres que influyeron en el ámbito.
Marie Madeleine Calais, s. XVIII
De nuevo en Francia, fue en 1740 que, por primera vez, una mujer obtuvo una certificación oficial de “Experta en Dientes”, lo que le permitió ejercer la profesión legalmente. Mademoiselle Calais fue discípula y aprendiz de Claude Geraudly, un reconocido dentista de su época. Otros nombres se cobran importancia en estos tiempos, como Madame Rezé, Madame Gerauldy o Madame Hervieux, quienes, a pesar de no contar con ninguna certificación, ejercieron como dentistas durante años.
Lucy Beaman Hobbs, s. XIX
Lucy Beaman Hobbs es considerada la primera odontóloga titulada de la historia. Durante años, fue formada por el Dr. Samuel Wradle quien favoreció que esta emprendiera su carrera como odontóloga -no titulada en su momento- abriendo su primera clínica en el 1862. 4 años más tarde, en el 1866, obtuvo su titulación de Doctora en Cirugía Dental por el Ohio College of Dental Surgery, gracias a su admisión en esta por parte del rector del momento, el Dr. Taft.
El s. XIX en España
En el siglo XIX, el papel de la mujer en España se reducía al de ser buena madre y buena esposa, por lo que su presencia o aceptación en universidades o academias estaba completamente fuera de lugar. Sin embargo, los numerosos obstáculos e impedimentos no frenaron los grandes esfuerzos que mujeres como María Rajoo, Manuela Aniorte y Paredes de Sales o Doña Dolores González hacían, día tras día, para ganarse un sitio entre los dentistas hombres.
María Rajoo, hija del médico Juan Rajoo, gozó de una gran reputación como dentista entre el 1800 y el 1830, siendo la primera dentista oficialmente reconocida en España. Se rodeó de grandes nombres como el del Dr. Ignacio de Jáuregui, dentista de la cámara de Fernando VII.
Manuela Aniorte y Paredes de Sales, viuda del dentista Francisco de Sales, estuvo ejerciendo la profesión de su marido gracias a la autorización con el título de dentista que le expidió la Universidad de Valencia. Por otro lado, es también reconocida por su libro, publicado en 1873, “El Arte del Dentista”, primer libro publicado de odontología escrito por una mujer.
Fue el 14 de julio de 1883 que, por primera vez, el rey Alfonso XIII autorizó. a las mujeres a ejercer de cirujano-dentistas, en las mismas condiciones que los hombres. No fue hasta años más tarde, en el 1908, que Clara V. Rosas se convierte en la primera graduada en odontología en España.
Hay cientos de nombres más de muchas otras mujeres que, a lo largo de la historia, han luchado. y trabajado por ejercer su profesión y cuidar de la salud bucodental de la sociedad. Poco a poco, y a pesar de dificultades, las mujeres en odontología han ido ganando reconocimiento y respeto en el sector. A día de hoy, según datos del Instituto Nacional de Estadística, la presencia de la mujer en odontología es mayoritaria, contando con un 56,82% de presencia femenina en el sector.
